La hinchada en la Juventus lo insulta y podría reforzar al Barcelona de Xavi

Ángel Di María se encuentra divorciado de la afición de la Juventus y todo apunta a que saldrá de la institución por la puerta de atrás. El último capítulo del jugador en el Juventus Stadium dejó un sabor amargo, ya que fue despedido con pitos de su afición al abandonar el campo. Estos abucheos fueron el resultado tanto de la derrota sufrida contra el Milán, que aseguró su clasificación para la Champions League y dejó a la Vecchia Signora sin opciones, así como también por las dos derrotas consecutivas, que sumadas a los 10 puntos de sanción han llevado al equipo a ocupar la séptima posición en la clasificación, según reportó el portal Studio Fútbol.

El argentino se despedirá del Calcio contra Udinense este próximo domingo, con un bagaje de ocho goles y siete asistencias durante esta temporada. Di María se marchará como agente libre después de aterrizar en la Juventus en 2022 tras dejar el PSG. 

Su llegada fue una alegría para la afición bianconeri, aunque la misma se fue diluyendo durante este curso debido a sus recaídas musculares, lesiones que lo han perseguido a lo largo de su carrera, motivo suficiente para que la directiva italiana no le ofreciese la renovación. Además, el alto salario de Di María ha generado descontento en el club italiano. 

A sus 35 años, el Fideo quiere seguir jugando y, sobre todo, mantenerse en un buen estado físico para mantener sus opciones de vestir la camiseta de la Selección argentina. En septiembre arracan las Eliminatorias Sudamericanas y Di María busca llegar en óptimas condiciones. Su próximo destino podría estar en Estados Unidos, en la MLS, siguiendo los pasos de otros argentinos como Gonzalo Higuaín.

El Diario Sport dice que el Barcelona analiza su llegada

Según informa 'Relevo', un nuevo destino para Ángel Di María sería el Barça que vuelve a sondear su incorporación aunque aún no hay nada concreto. De acuerdo con esta información, desde Arabia ya han contactado con el jugador y el Galatasaray también ha llamado a su puerta.